Para producir cualquier circuito integrado o placa de circuito, los fabricantes deben comenzar con un proceso llamado crecimiento de polisilicio. Esta aplicación, que se lleva a cabo en una gran aspiradora, ve varias varillas pequeñas en forma de horquilla conectadas a una fuente de alimentación y calentadas. Una vez que estas varillas alcanzan la temperatura adecuada, se agrega gas que contiene sílice al proceso, lo que permite que las varillas crezcan en diámetro.
Después de agregar el gas, cada varilla debe mantener una temperatura constante durante todo el proceso, lo que puede llevar varios días. A medida que cada varilla aumenta de diámetro, también se debe aumentar la potencia para mantener la temperatura; Sin embargo, si la potencia se incrementa demasiado, las varillas se derretirán y el proceso debe detenerse y comenzar de nuevo.